miércoles, 4 de enero de 2012

LA GUERRA DE LOS TERMOSTATOS

Hola! No se me olvida que he de hacer todavía posts de mis últimos viajes pero, trabajo y ocio me tienen muy ocupado y no he podido hacerlos hasta el momento. Tampoco he podido seleccionar las fotos de los últimos viajes para publicarlas. Bueno todo llegará.

Lo que no podía esperar más era este post. Se trata de un email enviado a mis compañeros de la oficina debido a la tradicional "guerra de los termostatos". Estoy seguro, de que puede hacerse extensiva a muchas otras oficinas del mundo y que muchos os sentiréis por igual identificados conmigo o contrarios a mí. No me enrollo más, y os paso el texto de mi correo.

"Buenas tardes,

compañeros/as. Aún y a riesgo de ganarme alguna enemistad, creo que no me queda más remedio que enviar este mail.

El uso que se está haciendo de la calefacción está siendo a mi juicio exagerado. En todas las documentaciones de uso, recomendaciones gubernamentales y sentido común, se indica que no se suba la temperatura de los termostatos por encima de los 21-23ºC. Aquí se ha llegado a subir a los 28ºC. No puede ser que salga cada medio día y tarde con dolor de cabeza y la sensación de vivir en verano y sin aire acondicionado, que no teclee bien por tener las manos sudorosas o que incluso se me nuble la vista en algún momento.

Me gustaría recordaros a todos/as, que el pasado mes de diciembre, cambiamos de estación y que ahora toca vivir el invierno. El invierno, para aquellos que lo desconozcan, es época de frío. Aunque Barcelona, esta maravillosa ciudad, esté situada al sur de Europa, el hecho de estar en estas fechas, significa a la fuerza que el mercurio baje. No llega al nivel de otros lugares dónde se baja mucho (hasta bajo cero) pero, tampoco estamos en el trópico, por lo que es normal que la temperatura oscile en estos días, entre los 8ºC durante la noche y los 18ºC durante un día soleado como hoy. Incluso, la previsión es que tendrá que bajar más cara a finales de enero principios de febrero. Insisto, ESTO ES NORMAL, NO VIVIMOS EN LAS CANARIAS.

Como he dicho antes, para que en la oficina no se sufra, existe esta maravilla de la tecnología que es la calefacción central. Utilizarla dentro de los baremos establecidos como lógicos, nos evita pasar frío dentro y que al salir a la calle el shock térmico sea moderado y no brutal.

No negaré, que determinadas personas, hombres y mujeres por igual, debido a diferentes metabolismos, podamos tener sensaciones térmicas diferentes. Esto amigos/as entra en lo común. Pero, una vez establecida la temperatura confort (repito que está entre los 21 y los 23ºC) existen maneras de combatir esas diferencias. Si todavía se tiene calor, se puede venir en maga corta o incluso remangar las mangas de la camisa o el polo. Si se tiene frío, primero de todo nombrar la existencia de la manga larga y el cuello cerrado o incluso el cuello vuelto. Además también existen una serie y variedad inmensa (sobre todo en el mundo femenino) de prendas que pueden complementar la falta de calor corporal. Permitidme nombrar algunas como los jerseys, chaquetas de punto o aquella que ya nuestras abuelas utilizaban, las rebequitas, amén de la variedad de tejidos y grosores y calidades de los mismos, que permiten a una misma prenda dependiendo del material con el que esté realizada, que abrigue más. No es lo mismo una fibra finísima de lino o sintética (que puede quedar monísima puesta aunque no abrigue un carajo), que una prenda de algodón o incluso de lana, que quizá no nos muestra tan atractivos pero, nos evita muuuuucho más el frío y, qué leches pero, ¿aquí no hemos venido a encontrar pareja verdad?

Pues nada, creo que ha quedado bastante claro mi pensamiento al respecto. No he dicho nada hasta ahora pero, después de los últimos dos días en los que debido al dolor de cabeza me cuesta lograr la concentración, he creído necesario haceros partícipes de mi pensamiento. A partir de aquí, podéis volver a subir la temperatura lo que creáis conveniente que os aseguro que no volveréis a escuchar que me queje.

Sin más, me despido de vosotros.

Un saludo,
Jordi Ullate"